El viático en la sombra
Sixteen years! Sixteen banners united over the field…
Escucho en el reverso de la palabra fiebre
un rumor de inscripciones, la lenta bocanada
de una luz desasida, las Dieciséis Imágenes
de un trayecto puntual como la santa orilla
del fuego o de la tierra o la luz fecundada
en un sello magnético o el transparente óvalo
de un viento suspendido por la aguja del tiempo:
las olas inflamadas del alba en el Caribe,
el camino hacia el Arno, la vista de Estambul
antes de amanecer, la dormida Cisterna,
la lluvia en Venezuela, el ovillo de Roma
–monumental, caótica–, la íntima piscina
de votos renovados, Saint-Michael en el mar,
las calles de La Habana, el puente milenario
los caballos de bronce robados por los Dogos,
los acuarios, los parques, los templos, los zoológicos
y en la mañana unánime el fulgor de tu cara.
Acaso no en los viajes ni en las arduas ciudades
ni en los hondos paisajes ni en las voces queridas
ni en los ávidos libros ni en las conversaciones
está el tiempo cifrado del amor y su llama.
Está en la noche antigua y en la diáfana sílaba
nunca dicha o soñada, sobrenaturaleza:
escúchala, recógela. Es casi nada y todo
de su forma y sonido secreto se desprende.
Es el viático doble en la sombra del mundo
para la vida inerme: su arcilla, su memoria.
David Huerta (México D. F., México, 1949). Poeta, traductor, y ensayista. Secretario de Redacción de la Gaceta del Fondo de Cultura Económica y Coordinador de talleres literarios en la Casa del Lago, de la Universidad Nacional Autónoma de México. Entre sus premios, Poesía Carlos Pellicer 1990 y Premio Xavier Villaurrutia 2006